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¿Cómo surgió la Psicología?

Psicología para tu vida

Bienvenidos a la sección Psicología para tu vida. Nos complace en el marco de la celebración por el Día de la Psicología en Cuba relatar un poco las causas históricas que propiciaron el surgimiento de esta ciencia y abordar elementos interesantes de su objeto de estudio. Para ello tomamos de referencia ideas del psicólogo Roberto Corral Ruso, expuestas en su libro ¨Historia de la Psicología¨.

El ser humano siempre ha sido una especie curiosa. Le interesa conocerlo todo. La aventura del ser humano en su búsqueda por entender, no solo se ha dedicado a elaborar saberes acerca del mundo que lo rodea o su propio cuerpo, también ha sido la búsqueda de conocimientos acerca de sí mismo y de los demás miembros de su especie. Sin embargo, la Psicología como ciencia y como profesión tiene apenas siglo y medio de existencia.

Esto no quiere decir que antes no existiera el interés y más allá, la necesidad de este conocimiento. Por el contrario, el ser humano desde el principio de su aparición como especie dominante sobre el planeta comenzó a buscar e investigar quiénes éramos, de dónde veníamos y adónde íbamos.

La Psicología como ciencia y como profesión tiene apenas siglo y medio de existencia

Con la Psicología existía un problema: en el caso de la Física, por ejemplo, el objeto a conocer (un planeta) o el proceso a explicar (la gravedad) eran acontecimientos que ocurrían fuera de la persona que conocía, es decir, se hablaba de un conocimiento objetivo cuando la demostración de su verdad era válida y aceptada por todas las personas sin ninguna duda. Sin embargo, en el caso de la subjetividad esta demostración no era válida para todos, porque el objeto a conocer era el mismo sujeto que conocía; por tanto, su conocimiento era subjetivo.

Hasta el día de hoy expresamos en el lenguaje corriente que una explicación es objetiva si es verdadera y decimos que una afirmación es subjetiva cuando esta depende de la persona que la dice y por tanto es una cuestión de opiniones o gustos. Esta diferencia retrasó considerablemente la aparición de la Psicología.

El nacimiento de la Psicología ocurrió en 1879, en Alemania. En realidad, este es apenas el lugar y la fecha más aceptada, porque apareció en varios lugares distantes y en tiempos aproximados, existieron exigencias que obligaron al nacimiento de la Psicología a pesar del problema del método.

En primer lugar, las nuevas ciencias comenzaron a encontrarse en sus límites con hechos subjetivos que necesitaban explicaciones y podían ser explicados de manera científica. A continuación citaremos algunos ejemplos:

  • Los fisiólogos que estudiaban  el cuerpo humano se tropezaron con el sistema nervioso, y demostraron que se producían efectos psicológicos al modificar el estado de este sistema. Un dolor es una vivencia subjetiva, pero era posible demostrar una causa objetiva, y seguir su proceso desde la aparición de la causa -digamos un pinchazo en el dedo- hasta la sensación subjetiva- el dolor. Estos resultados ayudaban mucho a comprender las enfermedades y mostraban mecanismos para descubrir sus causas.
  • Era también una exigencia social: existían enfermedades de la mente que debían tener explicaciones y, por supuesto, curas.
  • También la sociedad industrial necesitaba de la Psicología. Las nuevas fábricas se hacían con máquinas cada vez más perfectas, pero el problema estaba en cómo cambiar las acciones de los seres humanos ante estas máquinas y evitar costosos errores. Apareció el problema de seleccionar y entrenar a los seres humanos para manejar y dirigir los sistemas industriales complejos.
  • Era necesario comprender cómo las personas, específicamente los niños, aprendían y cómo enseñarlos mejor. También qué hacer con los que se retrasaban en el aprendizaje y así surgió el tema de la inteligencia y las maneras de medirla y evaluarla: el comienzo de los tan frecuentados test psicológicos.
  • Otro tema se refería a las formas en que los seres humanos vivían en sociedad: resulta que piensan diferente a cuando están solos. Cómo influir en sus mentes; cómo lograr que realicen o eviten determinadas acciones.

Cada ser humano es un mundo en sí mismo, y siempre diferente de los demás. La Psicología no puede ser una ciencia al estilo de otras más tradicionales: su objeto es móvil, dialéctico, en continuo cambio. Sus problemas también lo son. El ser humano además de curioso es original: está inventando nuevas ideas, teorías, y transformando su propia subjetividad.

En los tiempos por venir, la Psicología será cada vez más necesaria, no desde la pretensión de resolver problemas de los demás o decirles cómo son, sino desde la muy modesta función de ayudar – y ayudarnos- a comprendernos mejor. Tal vez este sea el sentido que esta ciencia tan joven e inexperta ha estado buscando durante toda su historia.

Alicia Serrano Coya
Licenciada en Psicología. Profesora del Departamento de Psicología en la Universidad de Holguín.
http://www.uho.edu.cu/

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