Por Osvaldo Batista Pérez
Carrera de Licenciatura en Turismo
Los estudiantes de tercer año de la carrera Licenciatura en Turismo, asociados a Grupos Científicos Estudiantiles de Gestión de Ocio, escalaron los días 29 y 30 de octubre hasta el punto más alto de la Colina del Internacionalista: el Mirador de la Modernidad, en Piedra Blanca, para cumplir un anhelo y demostrar sus conocimientos de gestión de atractivos turísticos, recreación y animación en la asignatura Gestión de Entidades de Ocio.
La excursión se organizó sobre la base de tres estaciones que impone el recorrido planificado. En la primera estación: Cremería Delicias 3 Coronas, se realizó la pregunta de entrada de lo que sería luego un taller de gestión de recreación. Lo novedoso de este momento consistió en que los estudiantes, para ganar el derecho a pasar a la segunda estación, tuvieron que demostrar sus conocimientos sobre aspectos culturales, históricos-patrimoniales y naturales de Piedra Blanca, recogidos en la bibliografía relacionada al proyecto comunitario “Con Todos…”, sugerida previamente.
En la segunda estación, ubicada en la Casa del Guardabosque, perteneciente a la Empresa Forestal, bajo la sombra de algarrobos, cocoteros y de árboles de uvas africanas, se realizó el taller sobre vivencias en la gestión de la recreación en entidades de ocio de las cinco provincias orientales que cubre la carrera. Con el análisis de cómo se corresponden los postulados teóricos sobre este tema y la situación actual que tiene la gestión de la recreación y de la animación, los estudiantes echaron riendas sueltas a la imaginación y propusieron ideas y soluciones creativas en beneficio de que se ofrezca una mejor hospitalidad en dichas instalaciones. El paso a la tercera estación estuvo antecedido por la siembra de guanábanas sudafricanas, traídas por el guardabosque como parte de un proyecto forestal con la comunidad. Esta actividad se realizó en la base del cerro de piedras blancas, que le dio nombre al lugar.
Un sendero abrupto con alta pendiente, pedregoso y de difícil acceso, condujo a los jóvenes visitantes hasta lo más alto de la conocida Colina del Internacionalista, la tercera aula del día. Desde allí, en balcones naturales abiertos a la fuerte brisa, la luz del sol y el silencio, algunos plantearon que solo se necesitaba algo de sombra para tener la mejor sala de estudios y sacar cinco puntos. Después de un breve descanso, se culmina la actividad docente con demostraciones prácticas relacionadas con las propuestas planteadas en la segunda estación.
Por otro lado, pudieron sugerir aquí cómo aprovechar más este recorrido y el lugar para el accionar extensionista de la FEU de la Sede Oscar Lucero Moya, la protección medioambiental, aprovechando los valores históricos y patrimoniales de la comunidad Piedra Blanca. De igual forma soñaron cómo convertir este recurso, esta cima, en un verdadero atractivo de naturaleza junto a otros miradores holguineros, si se ejecutan los proyectos que existen desde hace varios años; pues desde aquí son inigualables las visuales que se ofrecen de la modernidad holguinera al visitante, una real maqueta paisajística de la ciudad y sus cerros.
