Incrementar los resultados de la investigación-desarrollo y la gestión de la innovación es el objetivo que persigue la tercera edición del Taller Territorial de Agroecosistemas Áridos, organizado por el Centro de Estudios para Agroecosistemas Áridos, perteneciente a la Facultad de Ciencias Naturales y Agropecuarias de la Universidad de Holguín.
La jornada fue abierta con la Conferencia Magistral “Los retos y alternativas de la agricultura holguinera ante el cambio climático”, impartida por los profesores Dr. C. Ángel Rosales Valdés y el Dr. C. Alejandro Miguel Hernández Peña, un sensible tema que ocupa a los investigadores cubanos y extranjeros, en la lucha por cultivar una conciencia hacia el cuidado de nuestro entorno, en medio de una sociedad cada vez más consumista y ensimismada en las tecnologías.
Dentro de los impactos puntuales ocasionados por el cambio climático, los conferencistas destacaron la desaparición de grandes extensiones de tierra en los litorales; disminuirá considerablemente la producción de biomasa para la alimentación humana y animal; existirá una eclosión de huevos de numerosas especies antes de tiempo, cuando la presencia de depredadores es abundante; la ruptura entre los polinizadores y la etapa de floración de las plantas entomófilas y muy importante, a temperaturas muy altas los embriones morirán.
Este y otros temas continuaron su debate en tres comisiones de trabajo, donde cerca de 50 participantes abordaron, además, acerca de la producción animal y sostenibilidad ambiental; la formación agropecuaria y extensionismo para el desarrollo local; así como, la producción vegetal sostenible y ambiental.
En declaraciones del Dr. C. Alejandro Miguel Hernández Peña a la Dircom, este sostuvo que, los ricos creen que los desastres van a venir para los pobres nada más y están equivocados: viene para todo el mundo. Falta esa conciencia, ya no digo ambientalista, sino conciencia humana. Sin ella, no se va a poder evitar lo que viene.
Asimismo, Hernández Peña recalcó que, en el caso específico de nuestra provincia, en la zona de Gibara, Cayo Mambí (Frank País), Banes, Corintia, esas son zonas bajas y donde primero van a impactar las secuelas del cambio climático. Moa, que es una ciudad nuestra también, está en peligro de desaparición y según la Tarea Vida está previsto sea una de las primeras junto a Manzanillo, en Granma y otras en el país donde se sientan estos cambios; porque el mar no más se eleve un poquito, ya para el 2100 con un 85 cm de elevación, las personas que allí viven tienen que migrar hacia otros asentamientos poblacionales y serán más en el mismo espacio.
En este taller no solo participan investigadores universitarios, sino empresas interesadas en ampliar y estrechar sus resultados en el sector agropecuario. En este sentido, la Esp. Miriam Peña Puig, presidenta de la Filial Provincial de la Asociación Cubana de Producción Animal (ACPA) en Holguín informa que:
“Nuestra principal función es la capacitación y la transferencia de tecnología, de manera que tenemos que pensar que ACPA como asociación trabaja en apoyo a las estrategias de desarrollo de la agricultura, incluso apoya los programas de investigación de las universidades y sus centros de estudio. Por lo tanto, trabajar con la Universidad de Holguín es una práctica, no es una obligación o formalidad de un contrato o convenio. Es así que incorporamos a nuestro trabajo los resultados universitarios hacia nuestros centros productivos de asociadas y asociados. Además, en esta facultad tenemos un órgano de base de la ACPA, de la cual los investigadores son parte.”
Es así que los investigadores insistieron en la necesidad de conocer estos impactos cuyos pronósticos son confiables, para de esa manera lograr un nivel de conciencia ambientalista que permita al menos mitigar un impacto definitivo que ponga en peligro la vida del planeta.
