La revista universitaria Deporvida arriba a su aniversario 18 este 23 de febrero. En los últimos años esta publicación ha dado pasos de avance en su desarrollo, como lo evidencia su incorporación al catálogo de Latindex y una mayor circulación en espacios digitales.
Liliana Zayas Cano, es su actual editora. Por su juventud podría pensarse en un impulso creativo que atinó en la ruleta, pero nada más lejos de la verdad. Llevar a cabo un proyecto editorial como este depende del trabajo colectivo. Para constatar lo anterior no basta con consultar los últimos números de la revista, es necesario conocer cómo se realiza la labor editorial que se materializa en cada nueva edición.
Sobre las novedades que contiene el más reciente número, su editora comenta que una de ellas es la incorporación del formato epub (electronic publication), como uno de los formatos de lectura independientemente de los que ya se empleaban como el html y el pdf. Al respecto de esta novedad, refiere que su objetivo es llegar a un mayor grupo de personas, principalmente a los jóvenes. Este formato ofrece muchas facilidades en su empleo, sobre algunas de ellas explica que los usuarios pueden realizar una lectura más personalizada mediante una aplicación en el teléfono o en la computadora, porque permite visualizar los artículos, añadir marcadores y subrayar. Otra de las ventajas de este formato es que se ajusta al tamaño de cualquier dispositivo móvil, ya sea un teléfono pequeño o un tablet. El epub se puede reajustar a la pantalla, no así por ejemplo el pdf que tendría que ampliarse con los dedos o mediante un botón y así se le da un valor agregado a la revista.
Desde octubre del año pasado, Deporvida fue incluida en el Catálogo 2.0 de Latindex, noticia que toda nuestra comunidad universitaria recibió con agrado y es uno de los motivos esenciales para celebrar en este aniversario. Para Liliana significó una gran satisfacción, igual que para todo el equipo de Conciencia ediciones, porque desde meses atrás, con el trabajo de otras editoras como Elizabeth Aguilera, se estaba insistiendo en incorporar la revista a ese directorio. Esto es muy importante porque abre paso para podernos incorporar en otras bases de datos, expresó.
Algo curioso en este proceso fue que nos hicieron la invitación, o sea, nosotros no llegamos a postular la revista, sino que recibimos la invitación para formar parte de su catálogo, aclaró más adelante que esta no es una práctica habitual en esa plataforma, por lo que lo recibieron con mayor motivación.
Con cada nuevo año se festejan logros, pero se imponen nuevos retos. Uno de ellos es lograr mayor visibilidad de la revista, tanto a nivel local, nacional como a nivel internacional, comentó la editora. Entre las acciones que se han propuesto está el lanzamiento de un concurso online, dedicado al aniversario 18 de la revista. Contiene preguntas sobre el deporte y también específicas sobre la revista. Este concurso lo hacemos en coordinación con Eduardo Puente y nuestro objetivo es acercar más la revista, mediante las redes sociales a jóvenes y a todos aquellos interesados que puedan conocer sobre la revista y que se interesen también por su temática, por consultar los artículos, incluso hasta por escribir en ella, refirió Liliana.
Otro de los retos es seguir velando por el cumplimiento de las buenas prácticas editoriales, por cumplir con la periodicidad de las revistas, como lo hemos hecho hasta ahora. Por que no exista, por ejemplo, ninguna manifestación de plagio. Velar por la calidad de los artículos, por que cada autor se sienta realmente satisfecho cuando vea su trabajo publicado. Tener mucho cuidado en la maquetación, en la corrección y en la propia edición. Queremos también que nuestra revista pueda estar en otros directorios y bases de datos y estamos trabajando para alcanzar esta meta, concluyó la joven editora.
Al referirse al porvenir inmediato de Deporvida, comentó que queda todavía mucho trabajo por delante: tenemos que irnos actualizando en la medida que también el conocimiento se va actualizando a nivel mundial. Si queremos postular la revista para una base de datos como Scielo, eso llevaría consigo otros factores como la incorporación de la tercera unidad de crédito en la carta de originalidad de los artículos. Otro de los cambios sería establecer la ciencia abierta y una revisión por pares abierta, no como la tenemos actualmente, donde se mantiene el anonimato tanto de autores como árbitros. De esta manera el dictamen se pondría público para toda la comunidad científica y así se podría generar el debate entre la comunidad científica, árbitros y autores.
Liliana Zayas se incorporó al colectivo editorial en el 2020, por lo que ha realizado su labor en condiciones de pandemia desde el comienzo. Acerca de las características en las que se desarrolló la edición en este periodo expresó que el trabajo en la revista Deporvida, y en todas nuestras revistas, en la etapa de la COVID-19 demandó mucho esfuerzo. Cuba, como el resto del mundo, vivió meses sumamente difíciles en los que vimos a personas allegadas complicarse con la enfermedad o fallecer. Incluso de nuestra universidad y de la Facultad de Cultura Física como el Dr. C. Juan Antonio Salas Rondón y el MSc. Raúl Tejeda González, que nos abandonaron y fueron pérdidas irreparables. Sin embargo, durante ese periodo fue el momento donde más nos tuvimos que ayudar como equipo. En el colectivo de Deporvida necesitamos ayudarnos para poder cumplir con la periodicidad trimestral de la revista y cuando más arreció la pandemia, ya estábamos preparando la edición cincuenta, correspondiente al trimestre de octubre a diciembre del 2021.
Explica Liliana cómo en su labor de editora nunca se vio sola, y que a pesar del aislamiento y del teletrabajo, se mantuvo la comunicación empleando los medios tecnológicos y los teléfonos de los miembros del equipo.
La directora de la revista, Guillermina Zaldívar Cordón, siempre permaneció en contacto, coordinó los artículos internacionales de ese número. Nuestros traductores, Anabel Bacallao y Reinaldo Estrada Cingualbres, fueron de mucha ayuda porque también estuvieron al tanto y revisaron todos los artículos con sus correspondientes traducciones. Como editora su ayuda fue muy valiosa porque ellos detectaron algunos detalles que pudieron quedar en la edición. Nuestra directora, Yané Álvarez Rómulo, colaboró con el editorial y asesoró finalmente esa etapa. Daniela Terrero, fue la informática. Elizabeth Aguilera Díaz, aunque ya no es la editora de la revista, nunca se ha alejado por completo de ella y en esa etapa muchas veces tuve que llamarla porque tenía algunas dudas y ella me asesoró muy bien, siempre con la mayor disposición para enseñar porque es una gran educadora.
De manera general fueron muchos los que aportaron para el avance de la revista en esa etapa tan difícil. Gracias a los medios tecnológicos que dispuso la institución fue que pudimos sacar los números de la revista porque hicimos los trabajos de edición, corrección, maquetación, incluso hasta subir los números, desde la casa.
Al arribar al aniversario 18, Deporvida ha dado un salto hacia una meta superior. El impulso cuenta con muchas manos detrás.
