Por Sheila Díaz Abella.
En Hablemos de comunicación continuamos comentando acerca del tema de la comunicación efectiva que comenzamos en nuestra edición anterior. Hoy nos referimos a otros de sus componentes.
Una comunicación efectiva es aquella que, ya sea mediante la comunicación formal o informal en las organizaciones laborales, propicia el diálogo en las conversaciones o intercambios durante la actividad laboral, aspecto que enriquece las relaciones interpersonales y contribuye a encontrar soluciones a los problemas que pudieran surgir.
Algunos aspectos a tener en cuenta en nuestras conversaciones o intercambios son:
- Mirar a la persona con quien estamos hablando, pues esto demuestra interés en lo que nos está diciendo.
- Escuchar, no sólo oír sus palabras o criterios y, cuando se necesite, pedir aclaraciones.
- Usar un tono de voz apropiado evitando hablar muy alto o bajo.
- Dar oportunidad a que el otro hable, no sólo hablar uno mismo.
- Que las expresiones faciales, gestos, tono de voz, etc, esté acorde con nuestras palabras.
- Desarrollar la comunicación verbal y no verbal contribuye a una comunicación más efectiva, no obstante, recuerde que es más importante la naturalidad en su comportamiento.
Estas y otras ideas que se puedan añadir según su experiencia personal le serán útiles.
Una buena expresión y escucha activa, mostrar interés por las personas y su bienestar, son elementos que contribuirán a la comprensión y a encontrar soluciones al comunicarse más efectivamente en el ámbito laboral.