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Más allá de la piel: ¿qué tipos de racismos existen?

Más allá de la piel

En el primer tema de esta sección abordamos aspectos de definición del Racismo. Un fenómeno aún presente en nuestras sociedades, cuya existencia muchas veces se presenta de modo indirecto, no consiente y de múltiples maneras, de ahí que existan diversos tipos de racismos.

Aunque el más conocido es el racismo de color, desde antes hubo otras manifestaciones de discriminación con fines de dominación como el racismo cultural y el religioso. Con el transcurso del tiempo, esas formas de racimos se conjugaron con el de tipo biológico, al cual pertenece el de color, sustentado en prácticas científicas; por lo que en ocasiones también se identifica como racismo científico.

Pero no solo ha habido exclusiones por la apariencia física o la manera de pensar; También ha habido preferencia respecto a ciertos tipos de conocimiento en relación con otros; actitud que da lugar al racismo epistémico. En esta presentación comentamos brevemente el sentido que adquieren estas clasificaciones.

Aunque algunos autores sitúan el racismo en el siglo XVI con el sistema mundo moderno colonial, expresiones de este tipo hubo desde la antigüedad. En la civilización griega, siglos antes de la era cristiana, prevalecía una actitud de dominio que encontraba fundamentos en los pensadores de la época.

Los que no eran griegos eras considerados como bárbaros, así se daba un racismo cultural. Desde entonces se desarrolló una tradición que adopta a Europa como modelo de referencia en, pensamiento, expresiones estéticas; es decir, un patrón euroreferenciado que siglos más tarde se conjugaría con el estándar anglosajón. Ejemplos de esta idea la encontramos en adoptar prototipos de belleza importados desde estos lugares.

En el siglo XVI, con los procesos de colonización, el racismo religioso se expresa de forma marcada. Los dominadores europeos encontraron diferencias entre ellos y la población originaria de América respecto a sus creencias religiosas, situación que utilizaron como pretexto para poner a los indios bajo su tutela con la aparente finalidad de cristianizarlos.  Situación más adversa experimentó la población negra africana, trasvasada a América en la medida que los aborígenes se iban exterminando. Se estimaba que la población traída desde África carecía de alma, es decir, era connotados como menos humanos, por lo que los europeos concluyeron que debían ser esclavizados para trabajos de servicio, forzados, deshumanizados.

La relación entre esclavitud (fenómeno que existía desde siglos atrás) y la población africana negra dio lugar al racismo de color. Este no se expresa únicamente respecto a la población negra, incluye grupos poblacionales no identificados como blancos. En el siglo XIX, con la especialización de ramas de conocimientos como las naturales y el desarrollo de métodos científicos, se utilizan nuevos soportes para justificar, desde el poder que iba alcanzando la ciencia, la inferiorización de unas poblaciones respecto a otras: racismo científico-biológico con fuertes expresiones en el siglo XX. Caso del genocidio de población judía por el régimen nazi, de esta misma manera, la devaluación de la población negra al considerarse que tenían un cerebro menos desarrollado tanto para el análisis lógico como para la sensibilidad. También en este tipo de racismo se incluye la discriminación hacia las mujeres por considerarse que biológicamente tienen menos condiciones para ciertos aprendizajes.

Los fundamentos científicos utilizados para justificar esas manifestaciones de racismo biológico, también configuraron un orden jerárquico respecto a los tipos de conocimiento. El científico pasó a ser estimado como el más importante, de modo que otras formas de explicar o resolver ciertos procesos y fenómenos pasaron a ser desestimados, o sea, se configuró también un racismo epistémico. Expresiones de estas otras formas de conocimientos las hallamos en las historias personales, en el valor de las experiencias afectivas que pueden llegar a tener mucho valor, asimismo, en la sabiduría popular. Fuentes que también pueden ser muy provechosas en el mejoramiento humano.

En las presentaciones siguientes nos detendremos en cada uno de estos tipos de racismos por separado.

Realizado por: Marybexy Calcerrada Gutiérrez. Grupo de investigación de ciencias sociales y humanísticas (Giesh)

MSc. Lisneth Rodríguez Hernández
Licenciada en Psicología. Máster en Ciencias Sociales y Axiología. Directora de Comunicación Institucional, de la Universidad de Holguín.

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