Juan Pablo Aguilera Torralba es un joven periodista holguinero que en los últimos meses ha estado imbuido en un encargo diferente a los que en su breve experiencia profesional ha enfrentado. Tal vez este sea incomparable con cualquiera que pueda vivir en el futuro.
Por Liset Adela Prego Díaz
Juan Pablo Aguilera Torralba es un joven periodista holguinero que en los últimos meses ha estado imbuido en un encargo diferente a los que en su breve experiencia profesional ha enfrentado. Tal vez este sea incomparable con cualquiera que pueda vivir en el futuro.
Él junto a un equipo de diseño y comunicación trabajaron en la marca e identidad visual que se usaron en los días previos y durante la visita del Papa Francisco a la ciudad de Holguín.
¿Qué representó para ustedes diseñar elementos que serían visibles para el mundo, en tanto la visita del Papa a Holguín pondría a la ciudad en la mira de los medios internacionales?
Todo partió de la idea salida de los miembros de la oficina de comunicadores de la diócesis de Holguín. El diseño lo materializó Alfredo Aguilera, diseñador gráfico que radica en La Habana. La concepción de la idea fue un trabajo en equipo.
La visualidad es muy importante en cualquier evento. Este acontecimiento particular agregaba un poco de tensión porque Holguín estaría a la vista del mundo y el 21 de septiembre todos los medios de prensa estarían pendientes de lo que sucede en Holguín. Eso haría que la marca y la identidad visual que se hicieron transmitieran tanto la identidad de la diócesis como la personalidad de este Papa que es bastante auténtico en cuestiones de austeridad y proyección.
Lo asumimos con responsabilidad porque lo que hicimos saldría no solo en Cuba. Ya ha tenido repercusión en medios que han replicado la marca de Holguín, la que, de hecho, salió mucho antes de que se comenzara a difundir la que se ha usado en todo el país.
¿Cuál ha sido el impacto de esta marca e identidad visual?
Hay quienes provienen de una corriente más dogmática y otra generación y pretendían que se repitiera la imagen del Papa en toda la identidad. Pero se quiso hacer una marca que fuera austera, sencilla y fácil de representar, sobre todo por cuestiones económicas, y que se basara en los colores blanco y azul, que son sobrios y elegantes.
Utilizamos la imagen del Papa en algunos carteles porque es indispensable. Para nuestro trabajo buscamos elementos iconográficos que permitieran identificar la diócesis en su totalidad tanto Las Tunas como Holguín.
Por otra parte tuvimos una retroalimentación positiva. Incluso cuando se empezaron a mandar de México elementos para la divulgación de la visita del Papa, los primeros que llegaron fueron los de Holguín pues pidieron una marca identitaria que le daría prioridad a la hora de realizar el envío y la teníamos.
Como ya teníamos una marca estos artículos llegaron antes que los de Santiago de Cuba y La Habana.
¿Qué papel juega la fe en este ejercicio profesional?
La fe es importante para hacer cualquier profesión y si puedes desarrollar esta última dentro de tu fe es como hacer algo que te guste y que te paguen por ello.
Hacer la marca y trabajar en función del Obispado para evangelizar, que es a lo que estamos llamados los católicos, a través de tu profesión, es lo más grande que puedes hacer y al mismo tiempo lo poco que puedes hacer. Qué mejor manera de colaborar con la Iglesia que desde tu misma profesión contribuir a que todos conozcan lo que está pasando, a ser la voz de la Iglesia. Sabemos que ésta ha tenido contradicciones con el Estado aunque ahora goza de muy buenas relaciones, pero qué bueno que es así y que la Iglesia se nutra de profesionales que colaboren desde su formación y desde la fe contribuyan a que la sociedad esté cada vez más informada.
¿Cuáles son tus expectativas con la visita del Sumo Pontífice como miembro de la pastoral juvenil?
Creo Holguín es la diócesis que mejor se ha preparado para este acontecimiento. He conversado con jóvenes y me cuentan la experiencia de cuando fueron elegidos para integrar el coro. Ellos no cantan de manera profesional: fueron escogidos mediante un casting y pertenecen distintas parroquias desde Las Tunas hasta Holguín.
Los jóvenes son quienes animarán los momentos previos a la misa y ellos son la expresión de todo lo que hay detrás. También serán jóvenes que por su formación se dedican a la Gastronomía, quienes le sirvan al Papa durante el almuerzo.
Esto es muy emocionante pues el Obispo decía que el Papa viene a nuestra casa y le ofreceremos lo que en verdad tenemos, desde la humildad y la sencillez.
(Tomado del periódico ¡ahora!)
