No fue un día cualquiera, marcó un giro en la historia de la Cuba de finales de la década del 50 del pasado siglo. Jóvenes de la isla decidieron poner fin a la dictadura que manchaba de sangre su país y pagaron, con su sangre, tamaña osadía. Los universitarios holguineros de hoy recordaron el suceso, 62 años después.

La jornada comenzó con una marcha recorriendo la Avenida XX Aniversario hasta la sede Oscar Lucero Moya, de la Universidad de Holguín. Estudiantes, profesores y autoridades del territorio, recorrieron la distancia cuando el sol apenas comenzaba a calentar la mañana.

Es válido colocarles ofrendas, estimular en su honor a quienes se destacan y hasta entregar simbólicamente el carné de la UJC a los jóvenes que se lo ganaron. Pero confiero que, entre las muchas formas de recordar a los héroes, prefiero aquella en que nos esforzamos por hacer bien las cosas por las que murieron.

Por eso, todo acto de tributo comienza por mencionar sus nombres, no de todos, por supuesto, pero sí de muchos, sobre todo los más vinculados con lo que sucedió aquel 13 de marzo.

Manuel Pérez Almenares, presidente de la Feu en la UHo, ratificó en nombre de sus compañeros, el apoyo de la comunidad universitaria a la Revolución Cubana, al gonierno y pueblo de la hermana Venezuela y a la lucha por la paz y la soberanía.