Como digno homenaje a Manuel Ascunce Domenech y Pedro Lantigua, estudiantes de primer año de las carreras pedagógicas en la Universidad de Holguín ingresaron oficialmente al Contingente que lleva el nombre del joven alfabetizador asesinado el 26 de noviembre de 1961.
La orden del asesinato llegó directamente de la Agencia Central de Inteligencia, para intentar hacer fracasar la naciente Revolución que desarrollaba la Campaña de Alfabetización, una experiencia inédita donde participaron más de 34 700 educadores voluntarios, de 120 600 alfabetizadores populares, 13 000 brigadistas Patria o Muerte (del sector obrero) y más de 100 000 estudiantes de las brigadas Conrado Benítez (de la juventud).
Como es tradicional, cada año en esta fecha se incorporan al Contingente los estudiantes de primer año de las carreras pedagógicas de todo el país que, en el caso de la Universidad de Holguín, firmaron el libro Yo soy el Maestro.
El acto de abanderamiento se efectuó en la sede José de la Luz y Caballero, con la participación de estudiantes y profesores. El ejemplo del joven alfabetizador sigue marcando el accionar de los estudiantes que comienzan a formarse como profesionales de la educación.